En el cementerio

Puedo parecer raruna, no lo soy, no mucho, pero disfruto de momentos así. Al sol, en un cementerio tranquilo de un pequeño pueblo en la sierra de Logroño... ambientando una tumba y metiéndole mano al muerto... Bueno, igual tengo que ir a que me lo miren.
Con una esponja, una minervilla, pigmentos y cera de muebles... puedes crear el aspecto de una tumba que lleva un tiempo enterrada.  Lo de la cera me gusta para los tejidos, mezclas con los pigmentos y creas unas capas de suciedad. A parte de roerla, lijarla y frotarla con en el pie en un suelo áspero. Gloria bendita.